
Exalumnas
Las exalumnas siempre han sido parte importante de la gran familia Elenita, basta transcribir una de sus frecuentes expresiones como muestra, para apreciar también lo que el colegio significa para ellas:
“Tanto amor, bondad y sentido de pertenencia nos permite revivir recuerdos del añorado paso por nuestro hogar Elenita. Si vuelvo a nacer, tomaría la misma decisión, pertenecer a la familia Elena de Santa María”
Testimonios
«EL PODER APRENDER, PRACTICAR Y SOLIDIFICAR NUESTRA FE ES LA RAZÓN POR LA QUE ESTOY MÁS AGRADECIDA CON NUESTRO COLEGIO».
Considero que mi fe es la razón que impulsa mi vida, mis sueños y aspiraciones. La base pedagógica fue fundamental para continuar mis estudios superiores y desarrollo profesional.
Ahora me desempeño como botanista bióloga y trabajo para el Servicio Nacional de Parques de los Estados Unidos.
«CON MI DULCE TUTORA QUE SIEMPRE ME MOTIVABA A SEGUIR ESFORZÁNDOME, PESE A QUE YO ERA TÍMIDA, PERO ELLA VEÍA MI POTENCIAL».
Actualmente ejercer la medicina y estar especializándome en Endocrinología y Nutrición en Madrid, luego de superar un examen (MIR) de selectividad donde solo un 4% de las plazas ofertadas son para los extranjeros, cada vez más cerca de mi sueño de ser la mejor profesional de mi área, se lo debo sobretodo a mis padres y a mi Colegio Elena de Santa María.
«SALÍ DEL COLE, PERO NUNCA LO DEJÉ. ME HE MANTENIDO PENDIENTE DE SUS ACTIVIDADES. FORMO PARTE DEL CENTRO SOCIAL DE EXALUMNAS».
Me envuelven los colores dominicos, el estandarte de ESM y la insignia está prendida por siempre en mi corazón.
Mi mensaje a las alumnas es amar y respetar el colegio, a las madres, profesores y compañeras que con el pasar de los años se darán cuenta que son las mejores amigas.
«SER EXALUMNA ELENA SIGNIFICA SENTIRME ORGULLOSA DE HABERME FORMADO EN SUS AULAS».
Sentirme profundamente agradecida de aprender de los mejores maestros y maestras. Religiosas que con sólo mirarlas inspiraban gran respeto, pero a su vez, dulzura. Es sentir satisfacción de ser Guía Scout y entender que hay que vivir para servir. Ser Elenita es haber hecho una parada en la estación del cielo para continuar el viaje de mi vida.